Tutoría entre iguales

La tutoría entre iguales incluye una variedad de metodologías. Algunas de ellas son las siguientes:

• tutoría con rol fijo y habilidades cruzadas, en la que un alumno, a menudo de mayor edad, adopta el rol de tutor y se empareja con un alumno o alumnos tutorizados, a menudo de menor edad.
• tutoría recíproca, en la que el alumnado alterna entre el de rol tutor y el de tutorizado.

La característica común es que el alumnado se hace cargo de aspectos de la enseñanza y de evaluar sus logros. 

1. De media, la tutoría entre iguales tiene un impacto positivo tanto en el alumnado tutor como en el tutorizado, y puede ser una metodología rentable para impartir clases individuales o en grupos reducidos en un centro educativo.
2. La tutoría entre iguales parece ser más eficaz cuando se utiliza para revisar o consolidar el aprendizaje, en vez de para introducir nuevos contenidos.
3. La formación del personal docente y del alumnado tutor es esencial para lograr buenos resultados. Es esencial asignar tiempo suficiente para formar tanto al personal docente como al alumnado tutor para garantizar que la formación proporciona una estructura a la tutoría y para identificar e introducir mejoras a medida que avanza el programa.
4. Los bloques intensivos de cuatro a diez semanas de duración con sesiones periódicas (4-5 veces a la semana) parecen lograr un impacto mayor tanto para el alumnado tutor como para el tutorizado.  

La introducción de metodologías de tutoría entre iguales parece tener un impacto positivo en el aprendizaje, con un efecto positivo medio equivalente a un progreso de aproximadamente cinco meses adicionales en un curso escolar. Los estudios han identificado beneficios tanto para el alumnado tutor como para el tutorizado y en una amplia variedad de grupos de edad. Si bien todos los tipos de alumnado parecen beneficiarse de la tutoría entre iguales, hay ciertas evidencias de que el alumnado con un rendimiento bajo y aquel con necesidades educativas especiales obtiene mejores resultados.

La tutoría entre iguales parece ser especialmente efectiva cuando se supervisa al alumnado para garantizar que la interacción entre iguales es de calidad: por ejemplo, mediante cuestionarios para las sesiones de tutoría y formación y feedback para el alumnado tutor. En la tutoría entre iguales de distintas edades, algunos estudios han revelado que una diferencia de menos de tres años es óptima, pero es fundamental garantizar que la diferencia sea suficientemente amplia para que las actividades sean estimulantes para el alumnado tutorizado y suficientemente fáciles para que el alumnado tutor le apoye. Las sesiones de tutoría periódicas (4-5 veces a la semana) durante hasta 10 semanas parecen ser más eficaces que otros programas menos intensivos o más largos.

Las metodologías que logran buenos resultados también pueden tener otros beneficios, como apoyar el desarrollo social y personal del alumnado y mejorar su autoestima y motivación por el aprendizaje. 

Si bien existen evidencias limitadas que analicen específicamente al alumnado de entornos desfavorecidos, los estudios han demostrado que el alumnado con bajo rendimiento suele obtener más beneficios de la tutoría entre iguales. Las metodologías de tutoría entre iguales pueden ayudar al alumnado a disminuir las diferencias en su aprendizaje al ofrecer apoyo dirigido entre iguales para consolidar el aprendizaje que ha obtenido en clase, practicar habilidades e identificar y corregir los conceptos erróneos.

También existen ciertas evidencias que sugieren que la tutoría entre iguales puede ofrecer al alumnado tutor la oportunidad de repasar y revisar las habilidades y los conocimientos previos y desarrollar una comprensión metacognitiva de los contenidos.

La tutoría entre iguales se basa en una interacción estrecha entre dos o más alumnos en la que el alumnado se hace cargo de aspectos de la enseñanza y de evaluar sus logros. Al implementar metodologías de tutoría entre iguales, los centros educativos deben tener en cuenta cómo garantizarán que la calidad de las interacciones entre alumnos sea buena. Por ejemplo, mediante:

• Tareas bien estructuradas para que las sesiones se centren en los conocimientos actuales
• Apoyar al alumnado tutor con metodologías de enseñanza, como demostrar los conocimientos, corregir los conceptos erróneos habituales, proporcionar feedback y evaluar el progreso
• Análisis minucioso del emparejamiento adecuado del alumnado tutor con el tutorizado
• Proporcionar ayudas pedagógicas y estructuras de aprendizaje para orientar al alumnado tutor sobre la forma de estructurar el aprendizaje o los tipos de preguntas que debe plantear al alumnado tutorizado

Las intervenciones de tutoría entre iguales suelen implementarse en bloques intensivos de cuatro a diez semanas de duración. Las metodologías pueden incluir tutorías con alumnado de edades distintas o de la misma edad en parejas. Las metodologías se pueden basar en una relación determinada entre el alumnado tutor y el tutorizado, mientras que otras pueden ser recíprocas.

El coste medio de la tutoría entre iguales se considera muy bajo. El coste para los centros educativos se basa principalmente en la formación del profesorado y los recursos de aprendizaje. La implementación de la tutoría entre iguales también exigirá una dedicación moderada del personal docente, en comparación con otras metodologías.

Además del tiempo y el coste, los líderes escolares deben plantearse cómo maximizar la calidad de las interacciones de tutoría entre iguales y garantizar que se asigne tiempo suficiente para identificar e introducir mejoras en las metodologías. Al utilizar los programas, los líderes escolares deben evaluar la calidad y la solidez de las evidencias que los respaldan.

La fiabilidad de las evidencias en torno a la tutoría entre iguales se considera elevada. Se identificaron 127 estudios que cumplen los criterios de inclusión del Toolkit. El tema bajó un grado en la solidez de la evidencia porque un gran porcentaje de los estudios no se evaluó de forma independiente. Las evaluaciones realizadas por organizaciones vinculadas a la metodología, por ejemplo, proveedores comerciales, suelen tener un impacto mayor, lo que puede influir en el impacto general del tema.