The Challenge 2022: los worldshakers dan un paso al frente

¡Más cerca del sueño, worldshakers! 

Un total de 100 proyectos premiados continuan su camino en The Challenge. Todos a su manera, con un proyecto de cambio que pretende agitar el mundo. Son los futuros worldshakers: jóvenes que han ideado un proyecto de transformación que quiere volar más lejos. ¡Consulta quienes son en este enlace!

• Equipos seleccionados

En la primera fase se han presentado un total de 1.252 proyectos de 4.529 worldshakers, de los cuales el 53,9% son mujeres.  Acompañadas por 331 docentes de 297 centros educativos distintos de España, Portugal y Colombia. Después de la evaluación de los proyectos presentados, se ha seleccionado a 100 equipos, compuestos por 362 estudiantes y 100 docentes de 77 centros educativos distintos. 

Próxima parada: el Campus de Barcelona 

Después de un intenso trabajo en las aulas, los premiados van a poder reunirse todos juntos en el Campus de Barcelona. Una oportunidad única para desarrollar los proyectos que han traído a The Challenge y construir desde abajo el cambio junto a otros worldshakers. 

Hay presencia de proyectos seleccionados en toda España y Portugal, a excepción de Baleares, Navarra, Ceuta y Melilla. También se unen a esta edición 2 equipos de Colombia. Las comunidades autónomas con más proyectos presentados y seleccionados han sido Cataluña, Madrid y Valencia, seguidos por Andalucía y Galicia. 

El próximo 4 de mayo empieza un nuevo reto para todos los premiados en The Challenge. Aprender y mejorar las propuestas que han trabajado les dará las claves para convertirse en auténticos worldshakers. 

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¿Qué preocupa a los worldshakers?

Los proyectos que se han presentado a esta edición 2022 tienen cada uno su particularidad, pero nacen de temas más generales que preocupan a los worldshakers. El cuidado del medioambiente, la salud de las personas, las desigualdades sociales y los avances tecnológicos son las preocupaciones más repetidas entre los worldshakers que asistirán al Campus de Barcelona. 

Todas estas preocupaciones han despertado proyectos innovadores en el alumnado, ideas que se desarrollarán a través del Campus de Barcelona. Del principio hasta el final, desde el Campus hasta el Valley, convertirse en un auténtico worldshaker es impulsar un cambio en aquello que nos preocupa. 

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