La naturaleza ha sido una fuente de inspiración para el arte, que desde el siglo XX ha tomado las formas y estructuras del mundo natural como referencia. En esta visita los más pequeños descubrirán el diálogo entre arte y naturaleza a través de un conjunto de obras de todas las disciplinas. Mediante la observación y los materiales didácticos explorarán algunos procesos que conforman la vida, como la metamorfosis, la reproducción, la creación o incluso el peligro, y descubrirán su reflejo en el arte.
Objetivos de la actividad
Entender, interpretar y relacionar las representaciones de la naturaleza en el arte.
Explorar las posibilidades que brinda la naturaleza como fuente de inspiración a la hora de generar nuevas formas.
Valorar el arte como fuente de reflexión en torno a los procesos propios de la naturaleza.